La voz del Violín Flamenco
Paco Montalvo ofrece una visión inédita del comportamiento del violín como voz principal del flamenco. El violín canta y expresa emociones hasta ahora solo reservadas al cante y a la guitarra solista.
“A Paco Montalvo, la Voz del Violín Flamenco. Al escuchar a Paco Montalvo he rememorado la emoción que despertó en mi el más grande del cante, ¡El Camarón!”. “El Pele”.
Una genuina dimensión sonora. El violín canta en sus manos e irrumpe en el mundo flamenco, con virtuosismo, con toda elegancia, fuerza y brillantez. Poseedor de una sensible alma flamenca consecuencia de sus vivencias y vinculación con este arte desde su infancia. Ahora“Paco Montalvo ofrece una inédita dimensión de las posibilidades infinitas del instrumento con una apuesta creativa de gran nivel interpretativo.”. Francisco del Cid, Crítico Flamenco.
Con solo 22 años de edad Paco Montalvo ha actuado en más de 20 países junto a principales Orquestas en América, Asia y Europa interpretando las obras más sofisticadas de la música clásica occidental al máximo nivel. «Estoy absolutamente de acuerdo con Leo Brouwer quien escribió en el Diario Córdoba: ”Paco Montalvo es un genio“. Este joven ha logrado más a sus 18 años que muchos músicos a lo largo de toda una carrera artística. Está destinado a la grandeza, de eso no hay duda.» Crítica: John Walters / Tunes News
PACO MONTALVO, LA MENTE DE UN VIRTUOSO
Por R. AGUILAR
«”Soy un músico clásico pero tengo vocación de flamenco: siempre me ha gustado mucho”. Paco Montalvo continúa la tradición musical de los violinistas-compositores, realizando una extensa actividad musical.» Diario ABC
El músico proyecta la imagen de Córdoba con su empeño de colocar al violín en el centro de la interpretación del flamenco, Montalvo tiene un plan. Ambicioso. Atrevido. Audaz. «Mi idea es convertir al violín en el centro de la interpretación del flamenco». El músico cumple veintidós años justo el día en el que pronuncia esta frase en su casa del barrio de la Magdalena. Una casa luminosa y espléndida hecha, diseñada a la medida de la disciplina artística a la que se ha entregado desde niño con una persistencia de opositor y una pasión transmitida por vía genética. «Soy un músico clásico pero tengo vocación de flamenco: siempre me ha gustado mucho», añade. El modelo es el de Paco de Lucía: «Él consiguió poner a la guitarra en un lugar protagonista». El proyecto ha tomado forma en el V Congreso de Mentes Brillantes que se ha celebrado en Madrid entre el 13 y 14 de noviembre y en el que el que Montalvo interpretó «Sevilla» de Albéniz con su violín y por bulerías acompañado por su cuadro flamenco, formado por Rafael Trenas, Daniel Morales "Mawe" y Miguel Santiago.
El público para el que tocó no era cualquier público. Nunca lo es, pero en esta ocasión menos. Porque en el patio de butacas se sentaban cerebros llamados que han pasado a la historia del virtuosismo en diversos campos de la creación científica o artística. El padre del marcapasos, el inventor de las pantallas táctiles o el ideador de la foto finish o el helicóptero, por poner solo algunos ejemplos.
La carta de presentación de Montalvo en la cita internacional resume bien su trayectoria: «Se trata del violinista más joven en haber debutado en la sala principal del Carnegie Hall de Nueva York [tenía 18 años]. La crítica norteamericana y europea lo calificó como “Un músico deslumbrante”. A los 21 años lo describen como uno de los cuatro mejores violinistas del mundo. A temprana edad comenzó a tocar con su padre, posteriormente estudia con Yuri Petrossian y desde los 8 años con Néstor Eidler. Paco Montalvo continúa la tradición musical de los violinistas-compositores, realizando una extensa actividad musical». En esta última frase está cifrada una de las principales innovaciones del músico cordobés. Lo explica su padre, del que Paco heredó también el nombre: «A principios del siglo XX se perdió la figura del violinista-compositor, ya que el violinista pasó a ser solo intérprete, pero Paco ha roto esa tendencia, porque también compone», indica.
Pero Montalvo es algo más que un músico. A veces es solo un joven. A veces es solo un cordobés más. Un ciudadano como cualquier otro que mira a su alrededor y que saca conclusiones. Buenas y malas. De las que prenden el optimismo y de las que a uno le entran ganas de llorar, de no levantarse de la cama. Prevalecen las primeras. Este muchacho lleva la música dentro y la música es —casi siempre— una alegría. «Cuando llevo fuera de Córdoba una semana ya empiezo a echarla de menos, y al poco de volver ya siento la necesidad de irme otra vez: qué contradicción, ¿no?...», se pregunta en el salón de su domicilio.
Habla con una rotunda madurez de adulto si bien sus gestos, su mirada son los de un veinteañero recién llegado, como quien dice, a esa década de la vida. «Yo creo que Córdoba tiene mucho más que ofrecer de lo que ofrece: no podemos estar siempre mirando al pasado, hay que proyectar ese legado hacia el futuro, hacia la búsqueda de oportunidades empresariales, de ocio», reflexiona. «Sí, Córdoba es pequeña, pero no por tamaño, sino por la falta de movimiento, de actividad, de empresas, de ideas que entusiasmen a la gente a quedarse aquí», completa.
Cuestión aparte es la cantidad de sugerencias que este violinista encuentra en la ciudad en la que nació. «Claro... Córdoba inspira, me transmite paz, me siento en casa y eso es bueno para el espíritu, para crear... aunque fuera de España Córdoba no sea nada», bromea. «Pero, tranquilos, que aquí estoy yo para pasear su nombre», sonríe el compositor. Las herramientas que utiliza para tal propósito son sus cualidades musicales y, en concreto, la hibridación entre el instrumento con el que ha demostrado un virtuosismo fuera de lo común con el flamenco. «Uniendo ambas cosas podemos elevar los nombres de Córdoba y de Andalucía fuera de nuestras fronteras», afirma convencido. «Tenemos que ser capaces, entre todos, de proyectar la Córdoba del futuro», concluye y vuelve a sonreír. Es la sonrisa amable y laboriosa de una mente brillante.
El talento cordobés Paco Montalvo ha irrumpido con su acreditado violín en el complejo universo del flamenco con toda brillantez y elegancia. Confiesa que tiene en mente convertir a este instrumento en un centro que ayude, incluso, a incrementar la consideración internacional del flamenco. Un ramillete de piezas flamencas de Paco de Lucía, transportadas con toda solvencia a su violín, ha hecho que Montalvo ofrezca una nueva dimensión de las posibilidades infinitas del instrumento con una apuesta creativa de gran nivel interpretativo. Este innovador planteamiento disfrutó de un gran protagonismo en el concierto que, con el nombre de El Violín Flamenco , ofreció recientemente Montalvo en el Teatro Price de Madrid, donde, acompañado de su grupo netamente cordobés, mereció los mejores elogios de público y critica. Como reconocimiento a su trayectoria, la Peña Flamenca Merengue de Córdoba le ofreció hace unos días un sincero homenaje, durante el cual el pintor y colaborador del Diario CORDOBA José Amate le hizo entrega de un cuadro de su autoría, materializando de esta manera el afecto y el reconocimiento de esta importante parcela del flamenco.
FRANCISCO DEL CID 06/12/2014